Desde Komorebi consideramos que toda persona tiene en sí misma la capacidad para estar y encontrarse bien, pero situaciones que hemos vivido y no han quedado resueltas, decisiones de supervivencia que tomamos en algún momento y circunstancias que tenemos que afrontar y no disponemos de los medios para hacerlo pueden estar alejándonos de ese bienestar.
En Komorebi respetamos la confidencialidad, que además de estar obligada por ley, es una condición fundamental para el establecimiento de la confianza básica necesaria para poder avanzar en la terapia. Garantizamos un espacio seguro libre de juicios y críticas, la prioridad es que la persona que acuda a consulta pueda conocerse mejor para resolver sus dificultades o conflictos.
Prestamos atención al síntoma y tenemos en cuenta que para que una terapia sea efectiva y su resultado duradero, hay que atender a la manifestación del problema, a su causa y cómo se mantiene activo.
Trabajamos con la persona desde un enfoque que cubre las áreas física, social, intrapsíquica, existencial y esencial.
Los motivos que han llevado a comenzar la terapia pueden cambiar a lo largo del tratamiento. Algunos ejemplos son la angustia, los miedos, inseguridades, sentirse perdidos, dudas, obsesiones, exigencias, críticas, quejas, pereza, pasividad, duelos, desánimo, dificultad para expresar o gestionar las emociones, dificultad para identificar o comunicar las propias necesidades, rigidez, dependencia, poca valoración personal, problemas de pareja, depresión…
La terapia es un lugar para el cambio y la transformación.
Es una primera sesión, describes lo que te lleva a la terapia y el terapeuta muestra las pautas del tratamiento. Se establece el encuadre, donde se acuerda la frecuencia, la confidencialidad, la claridad en la relación terapéutica y la naturaleza del proceso.
Durante el proceso, se presentan dificultades, conflictos, defensas, cambios y transformaciones. El terapeuta acompaña a encontrar respuestas para resolver y poder evolucionar con una mayor conciencia y con acciones concretas.
Sin embargo, no se puede prescindir del estado de cohesión social, es un imperativo biológico. Sobrevivimos si estamos unidos y si somos seguros los unos para los otros.
La terapia de grupo proporciona la posibilidad de trabajar la relaciones, con uno mismo y con los demás. Nos hacemos espejos unos de otros, lo que conlleva actualizar y mejorar los avances que se han logrado con la terapia individual.
En la primera sesión, realizamos el encuadre, que conlleva confidencialidad y una alianza para que el grupo tenga un entorno seguro y pueda desarrollarse con autenticidad.
El grupo es un lugar para el crecimiento personal, que permite transitar y resolver de forma creativa, problemas, dificultades o conflictos, mejorando nuestra calidad de vida, decisiones y relaciones..
Komorebi es un Centro de Psicología y Formación reconocido por la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid con el nº de registro CS-1240 y avalado por el Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid como Sociedad Profesional con Nº SPM-0137.
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